La cúrcuma longa es una planta perteneciente a la familia Zingiberaceae y se ha utilizado durante miles de años en la India.
Su principio activo, la curcumina, ofrece diversos beneficios para el organismo, entre los que se incluyen acciones antimicrobianas, antiinflamatorias, anticarcinogénicas, protectoras gastrointestinales, hepatoprotectoras, cardiovasculares, inmunológicas y antioxidantes.
Estudios han demostrado que la curcumina reduce los niveles de colesterol y triglicéridos, previene la aparición de tumores, mejora la salud cardiovascular, estimula la inmunidad y neutraliza los radicales libres.